Si hablamos de ciberseguridad, se nos viene a la mente, el sentido de la protección y  alerta, y es que la seguridad informática no es al cien por ciento segura y mucho menos en tiempos donde el COVID-19 ha dominado al mundo.

Dentro de las amenazas mayores a los que hace frente una empresa o compañía en internet, está el «Ramsonware», un tipo de virus informático complejo y que cada vez se torna más preocupante en .diversas partes del mundo. Lo cierto es que en el pasado, los virus se encargaban de dañar la información, modificar datos y hasta secuestrar equipos de los usuarios, ahora es capaz de usurpar gran parte de la información de la empresa, con el el objetivo de chantajearla y tener más posibilidades de obtener dinero ilícito. 

Hasta la fecha, el virus informático Conti ha filtrado los datos de 500 compañías en los últimos meses, generando de esta forma inestabilidad y caos entre las empresas. Los archivos adjuntos o enlaces presentes en correo dudoso nunca deben abrirse, ya que estos  son el origen fuerte de una infección. Todas las descargas deben realizarse solo de fuentes oficiales y verificadas. Los programas deben activarse y actualizarse con herramientas/funciones proporcionadas por desarrolladores legítimos. No es bueno usar herramientas de activación («craqueo») ilegales o actualizadores de terceros, puesto que son de alto riesgo y pueden causar infecciones de malware. Es importante tener  instalado y actualizado un paquete antispyware de buena calidad. Es recomendable no usa este software para realizar análisis periódicos del sistema y para eliminar las amenazas o problemas detectados. En caso la computadora u ordenador ya está infectada con CONTI, se recomienda ejecutar un análisis Malwarebytes para eliminar de forma inmediata el ransomware.